Pau Domingo
En el baloncesto de formación, hay clubes que no solo enseñan a botar y tirar, sino que construyen una identidad, una comunidad y un camino para crecer dentro y fuera de la pista. Esa es la historia que exploramos hoy: la de un club con tradición, con referentes, y con una manera muy concreta de entender qué significa formar personas a través del deporte.
Frente al desafío constante de competir con clubes más grandes, más recursos o más visibilidad, muchos clubes de barrio buscan nuevas formas de diferenciarse. ¿Cómo se puede mantener el talento en casa? ¿Qué papel juegan los entrenadores, los padres y la propia estructura del club en esa fidelización? Hoy nos adentramos en esas estrategias que van más allá de los resultados y apuestan por un desarrollo a largo plazo.
También hablaremos de la importancia de formar entrenadores dentro del propio club, de cultivar la pasión por enseñar, y de cómo esa continuidad entre generaciones puede ser la clave para que un proyecto crezca sin perder su esencia. La formación no termina con los jugadores: también comienza y se renueva constantemente en el banquillo. No se puede hablar de baloncesto de base sin tocar el eterno equilibrio entre lo táctico, lo técnico, lo emocional y lo económico. Desde cómo se gestionan los minutos hasta cómo se optimizan las instalaciones, pasando por la necesidad de educar a las familias en lo que realmente significa crecer en el deporte.
Y por supuesto, hablaremos de su famosa carta abierta que nos llevo a todos a hacer una reflexión sobre lo qeu significa el deporte, sobretodo el de formación.
Hoy, con todos nosotros, Pau Domingo.